miércoles, 2 de febrero de 2011

Juan Formell: “Ser un Van Van es…”

Juan Formell en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Amaury. Muy buenas noches. Estamos en Con 2 que se quieran. Ahora aquí, en 5ta y 32, en el barrio de Miramar, en los maravillosos estudios Abdala.

Hoy nos acompaña, voy a presentarlo con pocas palabras, porque decir música cubana, es decir, mi amigo querido, Juan Formell.

Formell. Encantado.

Amaury. ¡Qué alegría tan grande que al fin hayas podido venir!

Formell. ¡Me tenías preocupado! Yo dije: Yo no estoy en el grupo selecto.

Amaury. ¿Cómo tú no vas a estar en el grupo, muchacho? Si tú, tú eres…

Formell. Es una broma, es una broma, pero de verdad, bueno, yo te admiro mucho a ti, así que.

Amaury. Nosotros nos queremos mucho y en algunas… porque muchas veces la gente en los foros de Cubadebate y eso dice: Amaury solo lleva a sus amigos y yo digo: Bueno pero es bonito tener amigos ¿no? y tener amigos célebres como tú.

En el caso tuyo, Juanito, para empezar la conversación esta, se da un caso bastante particular dentro de la historia de la música cubana.

Te admira el público. El público no solo te admira sino que te quiere. Te adoran los bailadores, te respetan los críticos, te adoran tus colegas. ¿Siempre fue así? Sería la pregunta.

Formell. Yo, mi única aspiración…yo soy músico de vocación, mi padre era músico y a mí me fascinaba ver a mi papá sentado en el piano escribiendo música. Era un copista excelente, copiaba la música que parecía letra de imprenta.

En mi casa se hacía música por mi padre, todo el tiempo. A veces ensayaba con algunos músicos en la casa. Fue muy amigo de Lecuona, de gente así, tan importante, de Bebo Valdés. Y entonces, bueno, a mí ya te digo, la música me viene, pero yo lo que aspiraba era a tocar el bajo. Me encanta ese instrumento, porque yo creo que el bajo es como la columna vertebral de una agrupación musical.

Bueno, empecé a chapotear ahí con una guitarra un poco… Mi padre no quería que fuera músico porque había pasado mucho trabajo, y así, andando las cosas, bueno, yo llegué a terminar el Bachillerato, por ahí, me quedé por ahí. Y estudié un poco de inglés, me gradué de profesor de inglés, y hacía traducciones. Pero en definitiva el instrumento me mataba. Estudié con el maestro Orestes Urfé y con gente muy importante de aquella época.

Amaury. La eminencia.

Formell. Sí, entonces, bueno, nada, yo quería nada más ser bajista. La vida me fue llevando a otra cosa.

Amaury. Sí, lo que pasa, es que uno se pone a pensar y yo no conozco a nadie, incluso, a gente que no sabe bailar, yo le digo: Juan Formell y los Van Van y todo el mundo dice: a sus pies.

Formell. Sí.

Amaury. Ocurre una cosa rara. Nunca leí una mala crítica.

Formell. Ni yo.

Amaury. A lo largo de la historia. Con respecto a la orquesta, con respecto a una canción tuya, con respecto a tu trabajo y la gente del gremio, los músicos, todo el mundo dice: Juan Formell, Premio Nacional de la Música.

Formell. Sí.

Amaury. Quiere decir que a veces cuando se dicen esos Premios Nacionales de la Música, uno piensa que se lo van a dar a músicos llamados culto y no piensa en músicos populares. Y es que tu caso es bastante raro, todo el mundo, todos te quieren, todos te admiran.

Formell. Mira, no hace mucho me invitaron al Palacio de la Rumba. Una cosa que está ahí, frente al parque Trillo, en el antiguo cine Strand y de momento, mi mujer actual, me dice: Oye, ¿pero qué tú tienes que ver con la rumba?

Oye De La Habana a Matanzas, oye tal número, oye tal, o sea, un poco que yo me fui metiendo. Yo tengo, bueno, nací en el barrio de Cayo Hueso, pero además, me tocó vivir la época esa de Elvis Presley, de él y el rock, La Aragón, Arsenio (Rodríguez).

Amaury. La mezcla.

Formell. Después los Beatles, o sea, una mezcla de cosas. Me gusta mucho la música brasilera, oía mucha música brasilera, y así es, todo eso te va conformando y vas tirándole a todas las bolas, porque eso se llama así, digo, yo quiero. Mira, ayer descubrí, ni me acordaba, de ese disco mismo De La Habana a Matanzas, hay un danzón que se llama Aguardiente. Y digo: Voy a hacer un danzón, ¿por qué no? Claro, ya uno va a especializarse en realidad en lo que yo empecé a trabajar mucho, que fue el songo, la timba, toda esa historia. O sea, crear una nueva música bailable cubana, independientemente de que el son es el son y es el común denominador, pero en sí es una nueva música bailable, no es la misma.

Amaury. Los Van Van suenan diferente.

Formell. Suena diferente, es otra cosa.

Amaury. Sobre todo el tándem ese, bajo, paila, tumba.

Formell. Sí, sí, es la base, es la base.

Amaury. Es la base, además, es bien impresionante, digo, se lo digo a los que no van a los bailes, porque hay gente que no van a los bailes. Yo he estado en algunos bailes y cuando eso arranca, uno siente, porque además, yo bailo bien mal…

Formell. Sí, yo también (risas)…

Amaury. Oye, Juanito, ahora tú hablaste de tu fascinación por el instrumento, por el bajo, pero eso tiene que haber salido, aparte de tu padre, de tus andanzas en el barrio ¿Cómo era tu vida de niño? Porque eso es una vida de la que no se sabe mucho.

Formell. Mira, ya te digo. Yo nací en el barrio de Cayo Hueso, que es uno de los barrios más importantes que tiene una ciudad.

Amaury. De los más importantes.

Formell. De la capital. Eso estaba muy cerca de la Universidad. Yo vi todas aquellas manifestaciones que hacían los estudiantes cuando bajaban la Escalinata. Yo era un niño, ¿no?, pero tengo memoria de eso, de esa época.

Yo nací en el callejón de Hamel y ahí mismo estaba el callejón de Espada. Ahí se reunían Ángel Díaz, César Portillo, o sea, había un ambiente musical, pero, como yo era muy niño, en realidad tendría unos 10 años, por ahí, todavía no participaba, pero sí me influenciaba ese ambiente. Además un barrio riquísimo, para patinar, para no sé qué cosa, o sea, yo pasé una niñez muy bonita, muy bonita. Jugando pelota. En fin, esa fue mi niñez allí.

Después mi padre compró una casita allá en La Lisa, que ya ahí sí empecé a estudiar música un poquito más en serio.

Amaury. ¿Y cómo era la disciplina?

Formell. Uhhh, mi padre era de meter galleta, muchacho (risas) y además, muy autosuficiente. Mi padre tenía muchos conocimientos, era una gente con una cantidad de conocimientos…, entonces yo me ponía a solfear una lección y cuando no entonaba, ya yo empezaba a llorar porque sabía que lo que me venía para arriba era de madre.

Yo decía: Es muy difícil esto, ya tiene tres sostenido la armadura de clave y me decía: tres sostenidos, vamos a solfearlo en todas las claves, vamos a solfearlo en todos los tonos y yo, ¡papá!, y eso terminaba a golpes. Pero le agradezco muchísimo, en realidad.

Amaury. Es que la letra con golpe entra…. (risas)

Formell. No, porque es ese rigor de estudio que en la actualidad no lo hay -que parece muy duro, demasiado duro diríamos, ¿no?, de darle un cocotazo a un muchacho- pero me entraban las notas así, a cocotazo y a disciplina, levantarme a las seis de la mañana a estudiar el bajo y en fin, eso tiene que ser así. La música es de mucha práctica, de mucha dedicación, desde que empiezas, no es después, ni nada de eso, bueno, después hay que continuar, por supuesto, ampliando tus conocimientos, pero la cosa práctica…oye, ¿tú te imaginas esos muchachos que están, 4 ó 6 horas estudiando el piano? Eso es, si te pones a analizar eso es aburrido…

Amaury. Y los otros muchachos jugando en el parque.

Formell. Y los muchachos jugando en el parque. Eso es aburrido en realidad y es una dedicación, y cuando te metes en ese mundo, ya eres un niño que empiezas a dejar de jugar como habitualmente juegan los demás niños.

Amaury. Sí, no es como dice la gente con una lata y un palo. No es tan fácil. (risas)

Formell. No es así, no es así.

Amaury. Para llegar a ser Tata Güines, tampoco es con una lata y un palo.

Ahora, la primera vez que yo recuerdo haberte visto, incluso puedo recordar, yo tengo memoria fotográfica y puedo recordar que tenías un pulóver de rayas rojas. ¡Mira tú las cosas que yo recuerdo!

Formell. Yo me acuerdo que fue en Prado, que nos vimos una vez que conversamos.

Amaury. Esa fue la primera vez que tú y yo conversamos, sí, ya sí. Pero la primera vez que te vi fue en el Amadeo Roldán, estaba Elena Burke estrenando Lo material y tú estabas creo que acompañándola.

Formell. Sí, algo de eso, sí.

Amaury. Eso fue. Ahora, tú nunca abandonaste esas canciones, tus boleros, las canciones que toda tu vida la has hecho., pero ¿cuándo es que tú ya te metes en el mundo de la música popular, con Revé o antes tú habías estado en otro lado?

Formell. No, no. Hay un músico muy importante cubano que no vive en Cuba en la actualidad.

Amaury. Sí, pero existe, ¿cómo se llama?

Formell. Sí, sí, Juanito Márquez.

Amaury. ¡Ah!, Juanito Márquez, no, espérate, ese es un genio.

Formell. Yo era el bajista de la orquesta del (Hotel) Habana Libre y los arreglos eran de Juanito Márquez.

Amaury. Debe haber sido difícil.

Formell. Ya yo, inclusive, consultaba con él, pero me entró aquel bichito de hacer arreglos musicales y una composición, y bueno, pues nada, yo con Juanito ahí empecé a aprender. Manejaba muy bien Juanito Márquez la orquesta. Él le había hecho arreglos a la Riverside, a los Hermanos Avilés. La música bailable la manejaba muy bien.

Cuando yo salgo de ahí, entro en la orquesta Revé, que no era mi mundo. Yo había tocado con orquestas jazz band y había tocado jazz inclusive, ese estilo de música y bueno, de momento me vi en la orquesta Revé y dije: ¿bueno y aquí qué hago? Y en lugar de yo adaptarme a aquel formato, que era la charanga -a mí me gustaba La Aragón, por supuesto, porque La Aragón era una cosa fuera de serie, pero la orquesta Revé aquella no, aquella era una orquesta de segunda, no era una orquesta de puntería todavía-, bueno, pues ahí empecé a hacer los arreglos yo, y las composiciones mías, y esto hizo así, bum, levantó la orquesta y dije: ¡espérate, yo tengo en la bola para esto! (risas) Sí, porque uno descubre eso de decir, bueno ¿para que tú tienes en la bola? Bueno, yo tocaba muy bien el bajo, pero más que eso, la composición y los arreglos, eso es lo que decidió en mi vida en convertirme en una personalidad de esta música bailable.

Empecé a experimentar, a experimentar… salí de la Orquesta Revé, cree los Van Van. A partir de ahí, ya tú sabes, empecé todo.

Amaury. Sí, pero ahí me voy a quedar, en cómo formamos los Van Van. Porque yo me imagino, que el nombre Van Van, por supuesto, tenga que ver con la zafra de los 10 millones. Me imagino yo.

Formell. Tiene que ver y no tiene que ver.

Amaury. Ahí está, ¿por qué no tiene que ver?

Formell. Porque en realidad no se hizo en favor de la zafra. La zafra estaba en su pleno apogeo. Había una cantidad de slogan desde por la mañana hasta por la noche, en la televisión, en la radio, o sea, el nombre se usaba mucho…

Amaury. Sí, ¡de que van, van!

Formell. ¡De que van, van! ¡Oye, eso va y de que va, van van! Y a la hora ya de ponerle un nombre, empezaron los mismos músicos: Oye, los no sé qué, de no sé qué cosa. Yo les dije: coño, eso es muy largo, caballeros, tiene que ser un nombre más efectivo que sea pam, pam, una cosa así y bueno ¿por qué no Van Van? Así, exactamente, como una cosa tonta, pero no fue como se dice. Oye, ni fue por encargo como se ha estado manipulando por ahí: ¡Oye, Fidel mandó a hacer la orquesta!

Amaury. No, no.

Formell. No, no, nada de eso pasó, eso es mentira.

Amaury. Fidel quería que fueran los 10 millones, no que se hiciera una orquesta.

Formell. Una orquesta, ni nada de eso, surgió así espontáneamente y punto.

Amaury. ¿En qué movimiento tú te colocarías al principio, más cerca del jazz, más cerca del filing, más cerca de la rumba, más cerca del son?

Formell. Tenía mucha influencia, Amaury, de los Beatles, y de lo que yo traía, de ya te digo del mundo ese de la música rock. Elvis Presley me influenció mucho, pero había otros, Little Richard, Fast Domino, los Beverly Brother… Yo oía mucha música de ese tipo, en una emisora que se llamaba Radio Kramer que me influenció mucho. Pero claro, yo empecé a mezclar. O sea, cuando ya entro en Van Van ya yo vengo ya con una idea muy, muy marcada de lo que yo quería hacer. Era mezclar esa música, que diríamos actualmente puede ser música pop, más pop que jazz, y empecé a mezclar eso con el son cubano y esto es Van Van.

Amaury. Pero, ¿es Van Van desde el principio así?, ¿tú sentías que fue así?

Formell. Sí, desde el principio ya fue así. La orquesta Revé no. La orquesta Revé fue casual. Se me ocurrió un tema y bueno, déjame a hacerlo. Tenía muchas limitaciones la orquesta Revé también, no era totalmente los músicos que yo quería. No tenía a Changuito, por ejemplo, tenía a Pupi, pero no tenía a Changuito.

Entonces empecé yo a crear con Van Van lo que yo sí ya quería. Había tocado un resorte ahí y dije: esto va a funcionar. Y bueno, me salió bien.

Amaury. Bueno, hay un tema que se ha tratado mucho en documentales y todo eso, pero en televisión así, para tantos millones de personas que ven el programa, por suerte, no se ha tratado.

¿Cómo reaccionó, con el carácter que tenía, el queridísimo y respetadísimo maestro Revé, cuando tú le dijiste, no solo me voy sino que además me voy a llevar a Pupi?

Formell. No, eso provocó una reunión grandísima. Aquello fue una historia.

Amaury. Como se reunía uno en aquella época.

Formell. Eso fue una historia, una historia. Él se lo sintió, le dolió, pero no estaba preparado para esto que pasó con la orquesta. ¡Qué va! Porque era, ¡imagínate!, el Amadeo Roldán lleno, con Elena Burque y aquello era demasiado. Yo no aspiraba quizás al honor aquel y empezamos a tener diferencias de criterios, hasta que yo, mira; a mí me gustaba inclusive tener un buen director, así, gente que me dirigiera, yo no ser el director. Pero nos separamos de Revé y conmigo, pues se fue la gente: Pupi, el otro y el otro, oye nos vamos contigo. Hasta que por fin nos dieron la razón. Éramos un grupo de muchachos jóvenes, muy jóvenes, yo tenía veinte tantos, ¡imagínate!

Amaury. ¿Y los cambios? Yo veo los Van Van y veo los cambios y siempre, ¡fíjate qué curioso!, los cambios siempre han sido para mejor. Aunque normalmente uno se desconcierta un poco porque hay algunas figuras que son icónicas en los Van Van y tú dices: Se va Pedrito, por ejemplo, se va Pupi y tú dices: Bueno ¿qué va a hacer Juanito? O sea, y sin embargo, entra gente nueva y siguen los Van Van.

Formell. Mira, eso, Amaury, tú que eres compositor, eso lo solucionaba yo componiendo. En realidad yo no sé cómo todo me salió bien, porque de verdad, tú dices ya a diez años…

Mira, yo tengo una anécdota, a diez años de haberse creado los Van Van, que estaba conmigo José Luis Cortés, El Tosco. El Tosco se había ido para Irakere. Había como una cosa incierta y un bachecito ahí y yo hice un disco que para mi criterio es un disco muy bueno. Ese que trae De La Habana a Matanzas, que trae el danzón ese que yo te digo, Tú tranquilo… Hay una cantidad de números buenísimos ahí. Pero no pasa nada con ese disco, nada. Metí los trombones en aquel momento…

Amaury. Es el momento que entran los trombones.

Formell. En ese momento cambia lo que es el Consejo Nacional de Cultura a Ministerio de Cultura y ya con el Ministerio de Cultura, Julio García Espinosa me dijo una frase, que no me la dijo ni por malo, ni por… me dijo la verdad. Me dijo: Juanito, el problema es que hay que hacer algo para compulsar esto. Le digo: Oye, ya llevo diez años metiendo palo y una cantidad de números que yo había compuesto. Y me dijo: pero la vida es así. E hice El Buey cansa´o.

O sea, cambió totalmente todo el panorama, era otra orquesta y así…entró Israel, aquel muchacho…

Amaury. ¡Cómo no!, Israel Cantor.

Formell. Israel Cantor, que ya falleció.

Amaury. Fallecido, desgraciadamente, una voz tremenda.

Formell. No, tremenda voz. Se va Israel y entonces le empiezo a dar más protagonismo a Pedrito Calvo y así… Armandito Cuervo también se fue.

Amaury. Verdad que sí, Armandito.

Formell. Armandito Cuervo, que ya falleció también. Entonces, bueno, cuando entra Mayito, yo me acuerdo que fuimos para Azúcar, en Cancún…

Amaury. ¿Mayito venía del Moncada, no?

Formell. Venía del Moncada tocando el bajo. Lo traigo, lo pongo ahí a cantar los números del otro Mayito, el flaco.

Amaury. Sí, del flaco alto.

Formell. Del flaco alto, y entonces cuando estábamos en Cancún, en Azúcar, le hago La foto en la prensa. Le dije: Ya te coloqué ya, y ya salimos del bache. Y me dice él: ¿de qué bache, de qué tú estás hablando? Le digo: Ya salimos del bache. Porque yo sabía que íbamos a salir así otra vez. O sea, a base de composiciones, es que en realidad todo eso yo lo he ido llevando y lo he ido sorteando.

Ya te confieso que en la actualidad, me ha sido más difícil, uno se agota, no es mentira.

Amaury. Ah, pero tú estás entero, Juanito, no digas eso.

Formell. No, no, de verdad, uno se agota ya en muchos sentidos y bueno, por suerte, así mismo como Pupi lo hizo -Pupy es un gran compositor de esta música-, yo tengo a Cucurucho al lado ahora, al pianista, que es buenísimo componiendo.

Amaury. Los Van Van están tremendos.

Formell. Samuel está componiendo muy bien. Claro, yo sigo haciendo alguna cosita, hago un número, dos números, pero ellos llevan casi todo el peso, o sea, por eso es que Van Van se ha mantenido. La gente dice: oye, pero ¿hasta dónde, hasta cuándo?

Amaury. ¿Hasta cuándo? (risas)

Formell. Esto es a base de componer, de tener todo esto. Tengo buenos arreglistas. Les digo: ¡bueno, espérate, tranquilo! Estamos en talla, sí, como dice el Tosco.

Amaury. Ahora, pero fíjate, yo quiero hablar de tus sentimientos cuando no estás en el 1, cuando Van Van no ha estado en el uno, cuando ha pasado alguna orquesta y se ha ido adelante.

Formell. Eso es como pincharte. Cuando tú te siente que estás dentro del grupo de los mejores, pero no eres el 1, como dices tú, te lo sientes y te obliga a hacer así y a dar un vuelco, porque sé que todavía puedo hacerlo.

Amaury. Pero a mí me parece que el cambio más drástico -fíjate que tú me has hablado de muchos cambios-, el cambio que yo me quedé sin aire cuando me lo dijeron: se fue Changuito y entró Samuelito. Samuelito ha resultado un genio, pero yo creo que ese fue un momento duro de los Van Van.

Formell. Lo que pasa es que Samuel… a mí no me gusta hacer las cosas a la fuerza ni tampoco porque sea mi hijo, ni porque nada. Yo no soy así. Samuel tocaba con Isaac Delgado y yo decía: ¡bueno espérate, este muchacho tiene en la bola para..! Cuando lo oí tocando, dije: tiene en la bola, tiene en la bola…

Samuel ¿qué le pasa?, que vio a Changuito desde chiquitico tocando y como estudió percusión, pues él tiene muchas cosas de Chanquito. Tiene ya su propio estilo, pero tiene muchas cosas, tiene la base de Changuito, fíjate en esto, sin que Changuito se haya sentado a: te voy a dar clases. No, no es eso, es mirándolo nada más.

Ahí, yo lo llevaba a los bailes, se sentaba ahí, chiquitico, y mirando, y mirando, y mirando, y mirando, el día que se la solté en la mano…claro, pasó trabajo al principio como también tú dices, pero enseguida se fue ajustando, se fue ajustando. Se dio cuenta dónde estaba el truco. Nos sentamos a hablar y le dije: mira, es así, esto es así. Yo dirijo la orquesta con Changuito, o sea, es simplemente una mirada entre Changuito y yo. Eso le costó trabajo, porque se entretenía, estaba mirando para otro lado. Y entonces yo le decía: es conmigo.

Amaury. Mirando a las muchachas porque él es bien bonito.

Formell. Claro. Es conmigo. Entonces bueno, hasta que fue madurando en eso, como es lógico, y en la actualidad lo está haciendo muy bien. Y además, ya vivía en la orquesta, él sabe todo lo que hay que hacer, sabe todos los trucos y sabe todo ya.

Amaury. Ahora, una pregunta que yo siempre te he querido hacer. Yo recuerdo que en un momento la gente decía: La Nueva Trova era como una especie de Cosa Nostra, de pandilla. Entonces la pregunta vendría: y después los de la Nueva Trova decían: Los de la música Popular Bailable, también tienen como una… ¿No hay rivalidades ahí fuertes?

Formell. No, mira, hubo un tiempo en que la Nueva Trova planteaba que la música que hacíamos nosotros, los textos, eran muy, muy simples, o sea, no había una poesía.

Amaury. Enamorada, claro, o política.

Formell. Entonces yo, yo siempre dije: espérense, caballeros, yo, en mi criterio, tú escribes textos que inclusive, a veces son críticos, a veces son crónicas, a veces, no sé, pero tienen, tienen un por qué, lo que pasa es que es con un lenguaje más simple, más sencillo, para que el bailador ese pueda bailar aquello y disfrutarlo.

Amaury. Y también esté escuchando.

Formell. Está escuchándote a la vez. Son dos cosas, no vamos a pensar que es fácil. Es complicadito, es complicado porque lo que sí tú no puedes es hacer una letra boba, boba no, pero tampoco tan complicada. Ahí hay una cosa intermedia que después lo fueron entendiendo. Pablo lo entendió, lo entendió Silvio, los grandes, tú mismo…, los grandes de ese movimiento fueron entendiendo de que esto tenía, además, estamos hablando del texto, en la parte musical rompimos. Yo fui uno de los que rompí, pero rompió Iraquere, rompió El Tosco, hay muchos que fueron rompiendo con los esquemas de la música aquella que también era tónica y dominante, el montuno y ya y se acabó, no, no… Fuimos haciendo más complejo aquello sin hacer concesiones, no, de nada, pero ya te digo, sí había una disparidad, pero fueron cosas paralelas. Ellos iban por aquí y nosotros íbamos por allá, y así, no pasó nunca nada. Después bueno, pasó lo que hice yo con Silvio en un Festival de Varadero…

Amaury. ¡Ah, buenísimo aquello!

Formell. …que prácticamente lo puse a bailar en Canción urgente para Nicaragua, Imaginada, y ahí ya la gente vio que había, que se podía unir todo aquello, que no había ningún problema.

Amaury. Ahora, el otro día, aquí, Adalberto, que estuvo en el programa, ¿no sé si lo viste el de Adalberto o estabas de viaje? y Adalberto estuvo hablando del fenómeno de los lugares para bailar. Es decir, después de aquel boom maravilloso de los 90, cuando todas las orquestas tenían un espacio, todo el mundo trabajaba en todos lados, hubo un momento determinado que se acabaron los lugares para bailar. Hicimos el programa, hicimos la entrevista con Adalberto. Adalberto dio su punto de vista que fue bien enérgico y bien fuerte. Adalberto tú sabes muy bien que es un hombre de carácter, de criterio. Y a los meses reabrieron la Tropical. Pero ¿tú crees que con eso se alivió la cosa?

Formell. No, no lo creo porque, más que la Tropical, hay varios problemas. Está la radio. La radio es muy importante y yo no quiero llegar a criticar a nadie en específico, pero…

Amaury. Mejor no.

Formell. Pues sí, pero la radio sí juega un papel importante. Tú sabes lo que es un programa en un horario estelar, un programa cuando no es en el horario estelar…

Hay un momento justo en que tú le haces así al público: bum por la cara, que es antes que termine el programa, o no sé. Hay cosas que están pasando en la radio que no son buenas, que se han excedido en difundir determinado tipo de música y no es bueno, no es bueno. Esta música es una sola históricamente y es verdad que a nivel internacional, lo que nosotros le llamamos Timba, que le llaman Salsa por ahí, bajó, en una medida bajó.

Pero aun con todo y eso, los lugares donde se hacen bailes populares, existen. Hay un público que ya va directamente a los lugares que se paga con CUC. Entonces ese es un público habitual, que va con el extranjero, que no sé qué cosa…Ese es un público habitual, que en realidad es el que le da de comer a toda una serie de cosas, con posibilidades. Vamos a hablar la verdad. Vamos a hablar la verdad…

Amaury. Claro que sí, claro que sí.

Formell. Entonces no es lo mismo la Tropical, que la gente que va con moneda nacional, al que a que va al Capri.

Amaury. Lógicamente.

Formell. O al Salón Rojo, o a un lugar de estos pagando con divisa, o sea, no es igual. Entonces eso también tiene su cosa mala, si se quiere, porque, el que por ejemplo, va, tiene posibilidades de ir al Salón Rojo, no va a la Tropical. Ahora, sin embargo, hay un fenómeno que sí te demuestra que en realidad no hay crisis con esta música, como muchos dicen: No, porque si la salsa cayó en crisis. No hay.

Nosotros acabamos de venir de Las Tunas, y en Las Tunas metimos 40 000 personas. Metimos 200 000 en Santiago de Cuba, cuando la gira nacional, o sea, público hay, depende de cómo tú se lo ofertes, como tú se lo des en la mano.

¿Por qué? Porque Santiago de Cuba no es igual que La Habana. Santiago de Cuba, no sé, para que vayan los Van Van o para que vaya Adalberto, cuesta trabajo, por muchas razones.

Amaury. Además, está lejos.

Formell. Y además está lejos y hay que gastar. Es al contrario, se gasta en divisa, porque el ómnibus en que tú vas para allá se alquila con CUC. Es un enredo, para que tú me entiendas.

Ahora, lo de la Tropical, yo pienso que es un intento de que pudiéramos tener un lugar en la Ciudad de La Habana, que no tiene la capacidad necesaria, por supuesto…

Amaury. Es que es chiquito, la Tropical es chiquito.

Formell. Es muy chiquito. Pero sí caracterizarlo, como lo había en la época del Palacio de la Salsa, que se reventaba el Riviera, eso que hubo en el Riviera, eso fue una época preciosa. Por ahí pasaban las mejores orquestas, la Tropical se puede convertir en eso y esto, ya sería un logro, me parece a mí. Si hubiera dos, si hubiera tres, fuera mejor.

Amaury. Yo creo que debía haber más de dos y de tres, de cuatro y diez.

Formell. ¡Pueden!, lo aguanta, por supuesto.

Amaury. Lo aguanta porque hay muchas orquestas. ¿Y tú sabes por qué yo te preguntaba esto? Y tú me lo explicarás todavía más. Yo voy mucho a Santo Domingo a cantar, y tú paras en cualquier semáforo, fíjate, de Santo Domingo, y tú oyes, el chiqui, chiqui, chiqui, el merengue.

Formell. Claro.

Amaury. Donde quiera. Tú vas por el Malecón de Santo Domingo, y todo el mundo está bailando con merengue, o sea, ¿por qué no está pasando eso? ¿Por qué tú pasas por al lado de los carros y tú estás oyendo, o reguetón, o hip hop, o rap, y tú no estás oyendo nuestra música maravillosa, nuestra música bailable en los carros de las gentes? Y sin embargo, eso pasó en los 90.

Formell. Te lo dije al principio, el problema es de la difusión. Y ahí el balance está, tirado para el piso, se pone más reguetón y se pone más de otro tipo de música.

No quiere decir que yo esté en contra del reguetón, no, al contrario. Mira, la gente cuando me ha preguntado eso, yo digo: el reguetón tiene que tener sus valores, porque cuando una música se hace tan popular, es porque tiene valores. No necesariamente tiene que ser que vamos en contra del reguetón ni en contra de… No, no, un balance normal. Yo siempre puse de ejemplo a la vitrola. En la época de la vitrola…Oye, para conseguir un medio le zumbaba el mango. Un medio, era un pan con bistec… Y que un tipo cogiera un medio para, no uno, diez medios para poner a Benny Moré: Pero qué bonito y sabroso (tarareando), era porque… O si no poner one, two, tree.. (tarareando canción de rock and roll) el tipo al que le daba por oír rock, ponía lo que él quería oír. Ahora te lo imponen ¿por qué? No sé, eso me parece que es uno de los problemas graves que tenemos.

Amaury. Ahora, yo quería hablar contigo de un tema que siempre me ha llamado la atención. Porque mucha gente dice, Juan Formell ha sido un cronista social. No, yo no estoy de acuerdo, yo por lo menos. Yo creo que tú has puesto el dedo en la llaga de problemas serios nuestros, raciales, sociales…

Formell. A veces viene como si se vieran incluidas las dos cosas. Si tú, por ejemplo, un número como La Titimanía, diríamos. La titimanía, es muy gracioso, el tipo del carajo, es como una crónica: Un tipo que iba para el trabajo y entonces vio a una niña espectacular, un titi, entonces ya se desvió. Pero eso es una crítica.

Amaury. Lo sé, lo sé.

Formell. Eso es una crítica al tipo que tenía un Lada y no iba a trabajar, porque era administrador de no sé qué cosa, porque tenía esa posibilidad…Era una crónica y era una crítica y además, con humor.

Amaury. Con humor y muchas veces con un doble sentido.

Formell. Como lo usó Matamoros, como lo usó Piñeiro, como lo usó Ñico Saquito, y como lo usó el Guayabero.

Amaury. Y como salías muchas veces, porque hay cosas que yo recuerdo, cuando una vez que se inventó aquí no sé qué cosa de Pedrito y tú sacaste El negro está cocinando. Rápidamente, rápidamente tú siempre estás como muy atento, es como si la idea…

Formell. Yo estoy en la calle.

Amaury. Claro.

Formell. A mí me gusta estar en la calle.

Amaury. Como si estuvieras siempre una gran ventana abierta, para mirar.

Formell. Oye, mira, tú no te puedes imaginar. Bueno, a veces lo puedes hacer y otras veces no lo puedes hacer, porque a lo mejor la frase es demasiado dura pero yo, yo siempre pongo el ejemplo: Yo estaba fregando el carro el otro día, y de momento un fregador le dice al otro: ¡Oye, acuérdate que somos fósforos de la misma caja! Esa gente se van a morir juntos. Si tú eres fósforo de la misma caja…, pero fíjate el valor que tiene esa frase.

Amaury. No, terrible.

Formell. Somos fósforos de la misma caja. Cosas como esas, yo he venido oyéndolas hace 40 años para acá, y cada vez que tengo la oportunidad o cada vez que tenía la oportunidad, o la tengo todavía, hago una cosita que habla. De una frase, yo hago la historia, ya viene el oficio ya, tú haces la historia, el montuno, el no sé qué, pero la frase es la que te sugiere.

Amaury. ¿Qué haces primero?

Formell. Bueno mira. El montuno, hasta que tú no tengas el montuno, no tienes nada en la mano, no tienes nada. La historia puede ser preciosa, puede ser simpatiquísima y todo. Bueno, ¿y ahora qué? Cuando llegamos al montuno ¿qué digo? El montuno es lo que repite la gente, y cuidado, porque nosotros acostumbramos al público a hacerle uno, dos y hasta tres montunos. Eso es lo que provoca al bailador. Esa es la diferencia, inclusive, entre la salsa esa de Nueva York y de Puerto Rico, a la que nosotros le decimos Salsa Light, porque se convierte en una cosita romántica y cuando llega al montuno se va, ahí ya se fue del aire.

Amaury. Ya se fue. Y los discos ahí se los llevan.

Formell. Se los llevan, ya y se fue y no pasó más nada. Pero nosotros no, el montuno aquí determina que es una barbaridad.

Amaury. Oye, Juanito, yo quiero que tú me hables de tus esposas. Yo sé que es complicado hablar de las esposas de alguien. Pero tú has sido un hombre con una capacidad amatoria, realmente impresionante. Y ahora tú estás con una muchacha, te acabas de casar.

Formell. Sí.

Amaury. Con una muchacha preciosa, por cierto. Háblame de las mamás de tus hijos, de las que puedas hablar. Porque yo sé que tú eres amigo de ellas.

Formell. Mira, la mamá de Samuel, Elisa y Juan Carlos, que son los tres mayores, Nati, Nati es un personaje riquísimo, Nati baila tap dance…Es una gente con un swing todavía, es una mujer, digo todavía porque ya somos ya muy mayores, no, y…

Amaury. No sigas diciendo eso, tú lo has tratado de insinuar varias veces y yo te estoy mirando muy cerquita.

Formell. Entonces Naty mantiene ese swing, ese espíritu riquísimo, para ponerse a hablar. Bueno, Mirta, todo el mundo…

Amaury. Mirta Medina.

Formell. Mirta Medina fue una relación muy bonita, de verdad muy bonita.

Amaury. Ahí fue cuando intimamos tú y yo bastante.

Formell. Sí, sí, cómo no, ahí fue donde nos conocimos más. Y bueno, con Mirta, qué te puedo decir de Mirta, es loca desde el punto de vista de inestable en cosas, su forma, inclusive yo tenía, por cosas que yo no había hecho nunca, ponerme a dirigir a una cantante solista: Ten cuidado con esto, no hagas esto. Tengo bueno, en fin. Pero la relación fue bonita.

La que siguió, Diana, que es la mamá de Paloma, bueno, pues loca, cada cual tiene sus…

Amaury. Divina.

Formell. Cada cual tiene sus virtudes y sus defectos, pero es una mujer muy agradable para mucha gente, muy chévere y bueno, ahí, fue una relación que duró bastante tiempo.

Amaury. Sí, sí, cantidad.

Formell. Y entonces, bueno, esta muchacha, que ya en las postrimerías… Ya, sí, porque ya es la postrimería, vamos a hablar la verdad, ya en la postrimería, aparece. Yaimara, se llama ella.

Amaury. ¿Pero cómo en la postrimería, Formell? La gente pensará que tú tienes 80 años.

Formell. No chico, no, no, no, pero mira, los años se sienten y el peso se siente. Pero qué pasa con Yaimara, que Yaimara es una muchacha a la que increíblemente, bueno, le encanta Elena Burque, le encanta Amaury Pérez…

Amaury. ¡Qué bárbaro!

Formell. …le encanta los Van Van de los años 70, y por ahí me robó, me empezó a robar. Porque toca la casualidad que esa es la música que uno oye.

Amaury. Es la que yo oigo también.

Formell. Bueno, tanto que recientemente nos casamos y me dijo: La música la pongo yo. Bueno, yo no sabía ni lo que iba a poner. Y cuando entramos al salón ya lo que se estaba oyendo era Frank Sinatra. Digo: Esta loca, esta mujer está loca. Así, cosas así.

Amaury. Está loca no, tiene buen gusto.

Formell. Sí, un gusto muy especial y entonces, tenemos una relación bonita, porque me respeta mucho, la trayectoria mía, es como, me ha idealizado, me ve como una cosa así.

Amaury. Como lo que eres Juanito, como lo que eres, como lo que eres, cómo lo que eres.

Formell. Lo que sí te puedo decir es que estoy pasando unos años muy bonitos, una época muy bonita de mi vida me siento bien físicamente, que es lo más importante.

Amaury. Yo te veo nuevo. Quisiera yo estar como tú estás ahora mismo, para que tú lo sepas. (risas)

Formell. Entonces bueno, eso me tiene, vivo bien en el sentido de los afectos. Los hijos míos la quieren a ella todos, no sé, en fin, creo que estoy haciendo una vida bastante agradable. En los finales, que los finales son peligrosos.

Amaury. No, no, no, siempre viene otro montuno, siempre viene otro montuno.

Formell. Siempre viene.

Amaury. Siempre se puede sacar otro. Ahora, yo quería irme a un tema, ya cerca del final, un tema que para mí es muy importante y es que, si yo tuviera que recordar algo, y voy a ser absolutamente honesto, del gran evento de Paz sin Fronteras, si yo tuviera que recordar algo, sería la participación de Van Van en ese evento. Porque ahí se multiplicó la heroicidad de Van Van. Y yo, que tuve alguna responsabilidad en eso, como tú recuerdas, yo miraba y yo vi a gente que incluso, se estaba yendo y cuando sonaron los Van Van todo el mundo volvió.

Formell. Volvió.

Amaury. Nuevamente, y fue una actuación importante. ¿Qué significó para ti y para la orquesta cantar para un millón de personas en la Plaza de las Revolución?

Formell. Mira, Amaury, yo…en primer lugar, la gente, bueno, en eso se ha especulado mucho, de que hubo una selección previa, de que la selección la hicimos nosotros. Yo sé que Juanes, bueno, yo conocía a Juanes en un festival en las Islas Canarias y él mismo me confesó, me dijo: Oye, para mí, la primera vez que yo vi a los Van Van sentí como que habían cosas que hacer y la posibilidad de que se podía unir toda esta música y fusionarla. Ustedes son como un ejemplo, bueno, en fin, me habló maravillas.

Y a partir de ahí, bueno, pues Juanes, no nos carteábamos ni mucho menos, ni teníamos ninguna relación, pero sé que él dijo: Los Van Van y punto y los Van Van. Pero bueno, tú tienes toda la razón, empezó aquel espectáculo kilométrico.

Amaury. Kilométrico.

Formell. Que no se terminaba y la gente en condiciones, un sol terrible…

Amaury. El calor.

Formell. Pero cuando yo salí que vi aquella masa de gente tan grande, yo caí muerto, dije no puedo con esto, esto nunca me había… a nosotros nunca nos había pasado.

Yo tengo mucha experiencia o quiero decir, la orquesta tiene mucha experiencia de haber estado en cosas difíciles. Yo estuve en un festival de la Playboy, con Bill Cosby como animador, cosas así que, cosas duras…de trabajar en escenarios donde la tarima te la viran al revés a los 45 minutos y un reloj así de este tamaño, y entonces tiene que medir bien lo que vas a hacer. No, no, cosas, en fin, hemos trabajado en lugares importantísimos. Pero que va, no tenía nada que ver con nada de lo que me había pasado nunca en la vida.

Yo entendí que el papel de Van Van era como trascendental. Te lo juro de verdad que lo entendí. Van Van ya a estas alturas aquí, tiene que hacer un papel trascendental. Yo tengo que compulsar a ese millón de personas de una forma o de otra. Está la bomba. La bomba es que lo que te sale de adentro, yo no sé ni que me salió y, dije cosas, dije: Bueno, ya se hizo. Porque tanto tú como yo tuvimos entrevistas pesadísimas a veces, haciéndonos preguntas que no tenían nada que ver.

Amaury. Que no tenían nada que ver con música.

Formell. Por eso, todas esas estupideces y entonces. Bueno, se hizo, lo hicimos. Lo hicimos y salió.

Amaury. Fue la gran frase, fue la gran frase.

Formell. Y cuando me viré, vi a Olga Tañón llorando, vi a Miguel Bosé llorando y digo: Caballero, espérate, ¿qué está pasando aquí? Logramos un poco que, como que fue el detonador y ya yo digo: esto tiene que explotar ya. Y no sé, eso lo guardo yo en mi memoria para toda la vida.

Amaury. Para mí fue como el abrazo de la Patria, ¿no?

Formell. Sí, si.

Amaury. De repente en los Van Van estaba toda Cuba, ¿no?

Formell. Estaba toda Cuba. Y la gente esa, ahí se hace, se materializa aquello, esa frase que la gente dice: Te la estaba dando de Van Van. ¿Qué es lo que tú te crees, que tú eres un Van Van?

Porque ser un Van Van, es como no sé, ser el mejor cubano. No sé cómo yo pueda traducirte eso, es una cosa bien compleja, pero yo sentí que el público nos quería decir eso: Oye, somos Van Van y a morirnos aquí, no sé, nos tocó, nos tocó estar ahí.

Amaury. Bueno yo, yo te quiero despedir, primero agradecerte, porque te estoy buscando desde los primeros programas te estoy buscando, no coincidíamos, no coincidíamos…

Formell. Sí, sí.

Amaury. Y quiero terminar, no solo dándote las gracias, sino diciéndote: yo también soy un Van Van.

Formell. ¡Ah!

Amaury. Te quiero mucho, Juan.

Juan Formell en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

En los estudios Abdala. Llega Juan Formell a "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

Juan Formell y Amaury Pérez en "Con 2 que se quieran". Foto: Petí

EEUU aprueba una ley que le permite al presidente “apagar” Internet

pánico-informático

Imagen: Star5112 (vía Flickr).

Entre todas las noticias que han salido de Egipto durante la última semana, quizás una de las más destacables para los fanáticos de la tecnología fue el ‘apagón’ de Internet que vive este país por cortesía del gobierno de Hosni Mubarak.

Aunque parezca absurdo y contradictorio con los “principios democráticos” de su país, en un futuro los estadounidenses podrían conferirles los mismos poderes absolutos a sus gobernantes.

La semana pasada, un comité legislativo del Senado de Estados Unidos aprobó el proyecto de Ley S. 3480, por medio del cual se crearía el National Center for Cybersecurity and Communications (Centro Nacional para la Ciberseguridad y las Comunicaciones, NCCC por su sigla en inglés). Esta nueva entidad quedaría bajo el mando del presidente y tendría una potestad absoluta para controlar la Red, incluyendo la posibilidad de ‘apagar’ Internet por 30 días.

A pesar de sus evidentes implicaciones negativas, la iniciativa estadounidense tiene fines muy diferentes a los que inspiraron a apagar la Red en Egipto. En teoría, el NCCC usaría sus poderes únicamente cuando haya ataques a la infraestructura informática de Estados Unidos, no para suprimir las opiniones o manifestaciones de sus ciudadanos.

Una fuente del gobierno le dijo a Wired que el proyecto no ordena que se apague la Red del todo, sino que se limita a que se desconecte “infraestructura crítica”. Por ejemplo, desconectar la presa Hoover de la Red cuando un ciberataque sea inminente. La pregunta que se hacen grupos de libertades cívicas que han cuestionado la ley, como ACLU, es ¿por qué no apagar esos sistemas afectados si ya se sabe que viene un ataque en lugar de desmontar los sistemas críticos de la Red?

Otros, como el periodista Dan Costa, de la revista PC Magazine, resaltan las dificultades técnicas y prácticas de apagar Internet en Estados Unidos. A diferencia de Egipto, la sociedad estadounidense tiene millones de conexiones de todo tipo -privadas, públicas y secretas-, por lo cual un apagón total de Internet al estilo egipcio sería muy difícil de lograr, por no decir imposible.

Por otro lado, la economía estadounidense y su sistema financiero dependen de las transacciones instantáneas que permite la Red. Apagar Internet por 30 días puede evitar que un ciberataque afecte la vida de sus ciudadanos, pero también podría causar daños profundos e imprevisibles al país.

No obstante su peligrosidad, precisamente el alto grado de sofisticación que tiene esta sociedad la hace más vulnerable a los ataques cibernéticos. Un ataque tan sofisticado como Stuxnet -el virus creado por EEUU e Israel contra plantas nucleares iraníes- que atente contra las redes del país podría poner en serios aprietos la maquinaria social y económica estadounidense y, en consecuencia, pondría en juego la seguridad del resto del planeta.

(Con información de ENTER)

Fiesta del libro dedicada a los pueblos del ALBA

20 Feria Internacional del Libro

Cincuenta y dos años después de creada la Imprenta Nacional de Cuba, cuya primera edición fue Don Quijote de la Mancha, La Habana tendrá una nueva celebración de la lectura con la edición numero 20 de la Feria Internacional del Libro Cuba 2011.

Cerca de 200 personalidades de 41 países asistirán a la Feria que estará dedicada a los pueblos del ALBA, lo cual incluye no solo a los 8 países miembros del ALBA sino a todos los pueblos de Latinoamérica y el Caribe. También estará dedicada al Bicentenario de la primera Independencia de América Latina. Unas 160 casas impresoras de 27 países mostrarán sus novedades en el encuentro.

Zuleica Romay, Presidenta del Instituto Cubano del Libro, informó en Conferencia de Prensa que este año el país hizo un gran esfuerzo económico para sostener la producción de libros. Dijo que han sido presentados 513 libros de 29 editoriales cubanas, con lo cual se puede hablar de una oferta editorial muy diversa que alcanza 4 millones 500 mil ejemplares.

Esta vez, como son 8 los países miembros del ALBA, se presentará una colección de mini libros con particularidades de nuestros países. Habrán otras producciones editoriales dedicadas a los niños con libros troquelados, y otros de laminarías que sirven como base material de estudios para aprender a escribir, a contar, a conocer a nuestros próceres y otros de educación elemental.

La presidenta del Instituto Cubano del Libro, explicó que pese al contexto económico que atraviesa el país, la Feria creció respecto al año anterior y se expande a otras 10 subsedes de la capital.

Edel Morales, Presidente del Centro Dulce Maria Loynaz, quien está al frente del programa literario, informó que el día 18 será entregado el Premio ALBA Narrativa en su segunda convocatoria. Este año fueron presentadas 142 novelas de autores procedentes de 17 países. Señaló como relevante el hecho de tan amplia participación teniendo en cuenta que se trata de un certamen al que pueden aspirar jóvenes de menos de 40 años.

El jurado esta vez lo integran: el conocido autor argentino Vicente Batista, la venezolana que fue Premio ALBA Narrativa el pasado año, Sol Linares, y, el cubano Reinaldo González, Premio Nacional de literatura. Este Concurso ALBA Narrativa que hasta ahora fue solo para los autores de habla hispana se extenderá a los de habla inglesa en su tercera edición.

Los autores a quienes se dedica esta cita literaria, los cubanos Fernando Martínez Heredia y Jaime Sarusky Millar, compartieron con la prensa la satisfacción de ser distinguidos por la Feria del libro 2011.

Esta vez la Feria será un acontecimiento cultural literario y artístico que comprenderá eventos literarios, foros de temas científicos, culturales, y presentaciones artísticas especialmente de importantes músicos provenientes de los pueblos que representan el ALBA. Habrá muestras de cine y conciertos con un gran impulso al Proyecto ALBA Cultural.

Uno de los eventos más sugerentes es el dedicado a Jóvenes escritores de América Latina y el Caribe, que se realizará en el Centro Dulce María Loynaz.

Entre los invitados extranjeros se encuentra la Premio Nóbel de la Paz Rigoberta Menchú, el brasileño Frei Betto, los argentinos Vicente Battista y Jorge Edmundo Coscia, el jamaicano Keith Ellis, el belga Eric Toussaint y el francés Hervé Fischer

La Feria Internacional del Libro permanecerá en La Habana del 10 al 20 de febrero y recorrerá todo el país hasta el 6 de marzo. Este importante encuentro literario fue instituido en La Habana en 1982 y esta considerado como el suceso cultural de mayor participación en la isla. El pasado año asistieron a esta cita más de dos millones de personas.

(Tomado de Cubadebate)

La suerte de Mubarak está echada

La suerte de Mubarak está echada, y ya ni el apoyo de Estados Unidos podrá salvar su gobierno. En Egipto vive un pueblo inteligente, de gloriosa historia, que dejó su huella en la civilización humana. “Desde lo alto de estas pirámides 40 siglos os contemplan”, cuentan que exclamó Bonaparte en un momento de exaltación cuando la revolución de los enciclopedistas lo llevó a ese extraordinario cruce de civilizaciones.

Al finalizar la segunda Guerra Mundial, Egipto estaba bajo la brillante dirección de Abdel Nasser, quien junto a Jawaharlal Nehru, heredero de Mahatma Gandhi; Kwame Nkrumah, Ahmed Sékou Touré, líderes africanos que junto a Sukarno, presidente de la entonces recién liberada Indonesia, crearon el Movimiento de Países No Alineados e impulsaron la lucha por la independencia de las antiguas colonias. Los pueblos del sudeste asiático y el norte de África, como Egipto, Argelia, Siria, Líbano, Palestina, el Sahara Occidental, el Congo, Angola, Mozambique y otros, enfrascados en la lucha contra el colonialismo francés, inglés, belga y portugués con el respaldo de Estados Unidos, luchaban por la independencia con el apoyo de la URSS y de China.

A ese movimiento en marcha, se sumó Cuba tras el triunfo de nuestra Revolución.

En 1956 Gran Bretaña, Francia e Israel, atacaron por sorpresa a Egipto que había nacionalizado el Canal de Suez. La audaz y solidaria acción de la URSS, que incluso amenazó con el empleo de su cohetería estratégica, paralizó a los agresores.

La muerte de Abdel Nasser, el 28 de septiembre de 1970, significó un golpe irreparable para Egipto.

Estados Unidos no cesó de conspirar contra el mundo árabe, que concentra las mayores reservas petroleras del planeta.

No es necesario argumentar mucho, basta leer los despachos informativos de lo que inevitablemente está ocurriendo.

Veamos las noticias:

28 de enero:

“(DPA) - Más de 100 000 egipcios salieron hoy a las calles para protestar contra el gobierno del presidente Hosni Mubarak, pese a la prohibición de manifestaciones emitida por las autoridades…”

“Los manifestantes incendiaron oficinas del Partido Democrático Nacional (PDN) de Mubarak y puestos de vigilancia policial, mientras en el centro de El Cairo lanzaron piedras a la policía cuando ésta intentó dispersarlos con gases lacrimógenos y balas de goma.

“El presidente estadounidense, Barack Obama, se reunió hoy con una comisión de especialistas para asesorarse sobre la situación, al tiempo que el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, advirtió que Estados Unidos reevaluaría las multimillonarias ayudas que otorga a Egipto según la evolución de los acontecimientos.

“Las Naciones Unidas también emitieron un fuerte mensaje desde Davos, donde se encontraba este viernes el secretario general Ban Ki- moon.

“Fuerzas egipcias, respaldadas por vehículos blindados, se desplegaron el viernes en El Cairo y otras grandes ciudades del país para terminar con las enormes protestas populares que exigen la renuncia del presidente Hosni Mubarak.

“Fuentes médicas señalaron que hasta el momento 410 personas resultaron heridas en las protestas, mientras que la televisión estatal anunció un toque de queda para todas las ciudades.

“Los eventos representan un dilema para Estados Unidos, que ha expresado su deseo de que la democracia se extienda por toda la región. Mubarak, sin embargo, ha sido un aliado cercano a Washington por varios años y el destinatario de mucha ayuda militar.”

En medio del desastre político que estaba golpeando al mundo árabe, líderes reunidos en Suiza meditaron sobre las causas que daban lugar al fenómeno que incluso calificaron como suicidio colectivo.

“Davos (Suiza), (EFE).- El actual modelo de crecimiento económico, basado en el consumo y sin tener en cuenta las consecuencias medioambientales, ya no puede mantenerse por más tiempo pues va en ello la supervivencia del planeta, advirtieron hoy varios líderes políticos en Davos.

“‘El modelo actual es un suicidio colectivo. Necesitamos una revolución en el pensamiento y en la acción’, advirtió Ban. ‘Los recursos naturales son cada vez más escasos’, agregó, en un debate acerca de cómo redefinir un crecimiento sostenible en el marco del Foro Económico Mundial.

“‘El cambio climático nos muestra que el modelo antiguo es más que obsoleto’, insistió el responsable de la ONU.

“El secretario general agregó que, además de recursos básicos para la supervivencia como el agua y los alimentos, ’se está agotando otro recurso, que es el tiempo, para hacer frente al cambio climático’.”

29 de enero:

“Washington (AP).- El presidente Barack Obama intentó lo imposible ante la crisis egipcia: cautivar a la población furiosa con un régimen autoritario de tres décadas y, al mismo tiempo, asegurar a un aliado clave que Estados Unidos lo respalda.

“El discurso de cuatro minutos del presidente, la noche del viernes, representó un cauto intento de mantener un equilibrio difícil: Obama sólo podía salir perdiendo si elegía entre los manifestantes que exigen la salida del presidente Hosni Mubarak y el régimen que se aferra con violencia a su posición de poder.

“Obama [...] no pidió un cambio de régimen. Tampoco dijo que el anuncio de Mubarak fuera insuficiente.

“Obama dijo las frases más fuertes del día en Washington, pero no se separó del guión que usaron su secretaria de Estado Hillary Clinton y el vocero de la Casa Blanca Robert Gibbs.

“‘Los Estados Unidos deberían usar toda su influencia incluyendo los más de mil millones de dólares en ayuda que suministra cada año al ejercito egipcio- para asegurar el último resultado (la cesión del poder por parte de Mubarak)’, indico el diario en su editorial.

“…Obama en su mensaje pronunciado de la noche del viernes dijo que continuaría trabajando con el presidente Mubarak y lamento que no mencionara unas eventuales elecciones.

“El diario calificó de ‘no realistas’ las posiciones de Obama y las del vicepresidente, Joe Biden, quien declaro a una radioemisora que no llamaría dictador al presidente egipcio y que no pensaba que debería renunciar.

“Mubarak que no puede actuar como si nada hubiese sucedido. Fox News dice que a Obama le quedan dos malas opciones respecto a Egipto.

“…advirtió al gobierno de El Cairo que no puede volver a ‘mezclar las cartas’ y actuar como si nada hubiese sucedido en el país.

“La Casa Blanca y el Departamento de Estado están siguiendo muy de cerca la situación en Egipto, uno de los principales aliados de Washington en el mundo, y recipiente de unos 1.500 millones de dólares anuales en ayudas civiles y militares.

“Los medios de información estadounidenses están dando una amplísima cobertura a los disturbios en Egipto, y vienen señalando que la situación puede resultar, de cualquier forma que se resuelva, en un dolor de cabeza para Washington.

“Si Mubarak cae, estimó Fox, Estados Unidos, y su otro principal aliado en Medio Oriente, Israel, podrían tener que afrontar un gobierno de los Hermanos Musulmanes en El Cairo, y un giro anti-occidental del país del Norte de África.

“‘Estuvimos apostando al caballo equivocado durante 50 años’, dijo a la Fox un ex agente de la CIA, Michael Scheuer. ‘Pensar que el pueblo egipcio va a olvidar que nosotros apoyamos dictadores durante medio siglo es un sueño’, completó.

“Nicolás Sarkozy, Angela Merkel y David Cameron pidieron por su parte al presidente ‘iniciar un proceso de cambio’ frente a las ‘reivindicaciones legítimas’ de su pueblo y a ‘evitar a toda costa el uso de la violencia contra los civiles’, el sábado en una declaración conjunta.

“También Irán llamó a las autoridades egipcias a atender las reivindicaciones de la calle.

“El rey Abdalá de Arabia Saudita consideró en cambio que las protestas representan ‘ataques contra la seguridad y la estabilidad’ de Egipto, llevados a cabo por ‘infiltrados’ en nombre de la ‘libertad de expresión’.

“El monarca llamó por teléfono a Mubarak para expresarle su solidaridad, informó la agencia oficial saudita SPA.

31 de enero:

“(EFE) Netanyahu teme que caos en Egipto propicie acceso de los islamistas al poder.

“El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, expresó hoy su temor de que la situación en Egipto propicie el acceso de los islamistas al poder, inquietud que dijo compartir con dirigentes con los que ha hablado en los últimos días.

“…el primer ministro declinó referirse a informaciones divulgadas por medios locales que apuntan a que Israel ha autorizado hoy a Egipto el despliegue de tropas en la Península del Sinaí por primera vez en tres décadas, lo que se considera una violación del acuerdo de paz de 1979 entre las dos naciones.

“Por su parte y ante las críticas a las potencias occidentales como EEUU o Alemania que han mantenido estrechos lazos con regímenes totalitarios árabes, la canciller alemana afirmó: ‘No hemos abandonado a Egipto’.

“El proceso de paz entre israelíes y palestinos se encuentra paralizado desde el pasado mes de septiembre, principalmente por la negativa israelí a frenar la construcción en los asentamientos judíos en el territorio ocupado palestino.”

“Jerusalén, (EFE).- Israel se inclina por el mantenimiento en el poder del presidente egipcio, Hosni Mubarak, a quien el jefe de Estado israelí, Simón Peres, respaldó hoy al entender que ‘una oligarquía fanática religiosa no es mejor que la falta de democracia’.

“Las declaraciones del jefe del Estado coinciden con la difusión por los medios locales de presiones de Israel a sus socios occidentales para que bajen el tono de sus críticas al régimen de Mubarak, que el pueblo egipcio y la oposición tratan de derrocar.

“Fuentes oficiales no identificadas citadas por el periódico ‘Haaretz’ indicaron que el Ministerio de Asuntos Exteriores israelí envió el sábado un comunicado a sus embajadas en EEUU, Canadá, China, Rusia y varios países europeos para pedir a los embajadores que hagan hincapié ante las autoridades locales respectivas de la importancia que para Israel tiene la estabilidad en Egipto.

“Los analistas israelíes señalan que la caída de Mubarak podría poner en peligro los Acuerdos de Camp David que Egipto firmó con Israel en 1978 y la posterior suscripción del Tratado de paz bilateral en 1979, sobre todo si tuviese como consecuencia el ascenso al poder de los islamistas Hermanos Musulmanes, que gozan de amplio apoyo social.

“Israel ve a Mubarak como el garante de la paz en su frontera sur, además de un apoyo clave para mantener el bloqueo a la franja de Gaza y el aislar al movimiento islamista palestino Hamás.

“Uno de los mayores temores de Israel es que las revueltas egipcias, que siguen la estela de las tunecinas, alcancen también a Jordania, debilitando el régimen del rey Abdalá II, cuyo país junto con Egipto son los únicos árabes que reconocen a Israel.

“La reciente designación del general Omar Suleiman como vicepresidente egipcio y, por tanto, posible sucesor presidencial, ha sido bienvenida en Israel, que ha mantenido con el general cercanas relaciones de cooperación en materia de Defensa.

“Pero el rumbo que siguen las protestas egipcias no permite dar por hecho que la continuidad del régimen esté garantizada ni tampoco que Israel pueda seguir teniendo en el futuro en El Cairo a su principal aliado regional.”

Como puede observarse, el mundo se enfrenta simultáneamente y por primera vez a tres problemas:

Crisis climáticas, crisis alimenticias y crisis políticas.

A ellas, pueden añadirse otros graves peligros.

Los riesgos de guerra cada vez más destructivos están muy presentes.

¿Dispondrán los líderes políticos de suficiente serenidad y ecuanimidad para hacerles frente?

De ello dependerá el destino de nuestra especie.

Fidel Castro Ruz

Febrero 1º de 2011

7 y 15 p.m.


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